Un tremendo clásico de las tablas nacionales escrito por Isidora Aguirre y Manuel Rojas llegó hasta la comuna de Chiguayante con un elenco de primer nivel bajo la dirección de Miguel Barra. Se trata de “Población Esperanza”, un relato de marginalidad que no ha perdido vigencia con el tiempo.
La puesta en escena trasladó a los asistentes hasta una población marginal, una toma de terreno con mediaguas donde distintos personajes conviven compartiendo día a día sus vidas, sus miserias y las esperanzas que alcanzan a tender en frágiles hilos.

Decenas de niños de Chiguayante disfrutaron de “Rojo. Historia de un crayón” obra de la compañía de danza Contensión, la cual generó reflexión en torno al concepto de la diversidad, a partir de la danza, el circo y el uso de materiales didácticos en la escenografía.
Basada en el cuento de Michael Hall, la puesta en escena muestra la historia de cinco crayones: amarillo, verde, naranjo, morado y rojo; quienes nos invitan a entrar en el mundo de su caja de lápices.
En la puesta en escena los colores juegan, se mezclan e interactúan dejando un mensaje de empatía y tolerancia, tan necesario en estos días.

Como parte de su programación de teatro en verano, el público de Chiguayante pudo conocer la historia de Petronila Neira Bustos, mujer oriunda de Coronel, cuyo cuerpo fue encontrado a orillas de la Laguna Redonda, el año 1910. Los detalles del crimen fueron de conocimiento público, sobre todo, a través de la prensa de la época que transformó este femicidio en una leyenda con resonancias hasta la actualidad.
Se trata de una puesta en escena que surge a dos décadas del estreno de la prosesión que recorre desde el Cementerio Municipal a la Laguna Redonda, y que tras convertirse en un hito patrimonial fue planteada como obra para exhibición en sala.

Un espectáculo lleno de gracia y ensoñación es lo que presentó la compañía Artemisa Danza ante un heterogéneo público chiguayantino. Allí se pudo disfrutar de una propuesta sorprendente en las aparecen bailarinas caminando en sus puntas a punto de convertirse en avionetas, trapecistas en tacones, árboles que crecen en las manos y cuerpos que vuelan con el viento, todo eso con música de Pink Floyd.

Tanto la comunidad escolar como el público general pudo aprender más sobre la vida y obra de la artista plástica Frida Kahlo (1907 - 1954), pintora mexicana relacionada con el movimiento surrealista. Su tormentosa vida marcó su producción artística, además de la relación amorosa que mantuvo con el muralista también mexicano Diego Rivera. En la puesta en escena, los chiguayantinos fueron testigos de un conjunto de emociones que se ve incrementado con el dolor físico que experimentó Frida producto de un grave accidente del que nunca logró recuperarse, transmitiendo un mensaje de lucha y resiliencia.